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jueves, 20 de octubre de 2016

Hola Buenos días.

  Quisiera comentar sobre el evangelio de hoy, comenzaré pegándolo para quien no haya tenido oportunidad de leerlo aún.


Evangelio según San Lucas 12,49-53. 

Jesús dijo a sus discípulos: 
"Yo he venido a traer fuego sobre la tierra, ¡y cómo desearía que ya estuviera ardiendo! 
Tengo que recibir un bautismo, ¡y qué angustia siento hasta que esto se cumpla plenamente! 
¿Piensan ustedes que he venido a traer la paz a la tierra? No, les digo que he venido a traer la división. 
De ahora en adelante, cinco miembros de una familia estarán divididos, tres contra dos y dos contra tres: 
el padre contra el hijo y el hijo contra el padre, la madre contra la hija y la hija contra la madre, la suegra contra la nuera y la nuera contra la suegra". 


Puede parecer difícil de comprender en nuestra sociedad de la "nomejuzguitis" que Nuestro Señor diga que ha venido a traer división. Sobre todo porque aunado a la corrección política se ha difundido la falsa creencia en un Jesús bonachón, buena onda, políticamente correcto.


Quien se compromete a seguir a Cristo experimenta un "fuego abrasador" que es la acción del Espíritu Santo, unas ganas de que todos se encuentren con Cristo le invade y le "quema" por dentro. Quisieras gritar a los cuatro vientos que Cristo vive, que en Él y sólo en Él está la verdadera paz, libertad, amor y gozo. También quien se compromete seriamente con el Señor, encontrará una feroz resistencia, principalmente y de manera más dolorosa en la propia familia.

Cristo no nos engaña, nos ha engañado más bien, aquella canción que dice: " Desde que voy junto a ti, la tierra que yo piso es como espuma..."

Seguir a Cristo inclusive destará una lucha interior, la del hombre viejo vs hombre nuevo.

¿Estás dispuesto a esto?


¡Ánimo! Vale la pena luchar.

MEJORAM

20/10/2016