Yo no puedo ser ni tradicionalista y menos liberal, ni de derecha y mucho menos de izquierda, ni racionalista pero mucho menos escéptico, ni fanático pero mucho menos indiferente.
Me gusta la misa en latín sin despreciar la Novus Ordo. Me encanta el latín y el don de lenguas, ambas desagradables para los demonios.
Reconozco eso sí, que han existido deficiencias en el compromiso de quienes pedimos el bautismo para nuestros hijos y no hicimos lo que nos tocaba para que amaran a la iglesia, la instrucción y defensa de la fe y que eso hubiera permitido que apreciaramos la belleza de nuestra liturgia.
Creo que las herejías a lo largo de la Historia de la Iglesia han fortalecido nuestra Teología. Creo que hay que prestar atención a los retos que estas nos suponen y crecer. Creo firmemente que la Iglesia (el Papa y los obispos) son los encargados de transmitirnos lo que la Iglesia cree, también creo que los laicos debemos formarnos, poner empeño en saber, conocer y transmitir a otros hermanos lo que nuestros pastores ponen a nuestra disposición y también es cierto que en ocasiones nuestros pastores no tienen tiempo pero eso no puede detenernos, tenemos el deber de prepararnos.
Estoy convencido de que no hay contradicción sino antes consecuencias lógicas entre comulgar, visitar al Santísimo en el Sagrario, ayudar y enseñar al que lo necesite, ver en el prójimo a Cristo, ya sea pobre, rico, alto, bajo o como quiera que sea y el que lo vea en una forma de ningún modo cancela la posibilidad de amarlo en las otras. No creo en los falsos dilemas que algunos enemigos de la verdad plantean entre buscar a Dios en la Eucaristía o en los pobres, entre Religión y Libertad, entre orar en lenguas y gozar de las oraciones en latín, entre amar nuestras tradiciones y la continua acción del Espíritu Santo en la iglesia.
En cuanto a mí respecta no beberé el veneno de la sospecha y en cuanto me sea posible siempre alertaré sobre cualquier ideología, moda, tendencia que induzca a sospechar de la iglesia y la autoridad eclesiástica, ya que creo firmemente que Jesús no nos engañó cuando dijo que Él estaría siempre con nosotros y que los poderes del infierno no podrían contra la iglesia (Mt 16,18)
Yo creo lo que la Iglesia enseña en el Catecismo y todo su Magisterio y repetimos cada domingo en el Credo.
Amén
MEJORAM
05/03/19
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Me encantó. Yo tambien creo en el credo que recito todos los domingos. Somos una sola iglesia, el cuerpo de Cristo, solo el enemigo busca dividir y creerse superior a los demás.
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