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martes, 1 de diciembre de 2020

EL MONOPOLIO DE LA VERDAD V

 

EL MONOPOLIO DE LA VERDAD

Parte 5




Tal como lo prometí, les traduciré un documento muy interesante sobre inmunidad, vacunas y covid:

 

EL TRATAMIENTO DE LAS ENFERMEDADES VIRALES: ¿SE HA SUPRIMIDO LA VERDAD DURANTE DÉCADAS?

Lee D. Merritt , M.D. **

 

Desde que comencé la escuela de medicina en 1976, hasta 2020, he escuchado el dogma de que las enfermedades virales no se pueden tratar (con algunas excepciones, como los antivirales para el VIH / SIDA), y ciertamente no con antimicrobianos. Mi hijo mayor, un cirujano general recién nombrado, recibió una educación mucho más reciente, pero con el mismo malentendido. Dado que las enfermedades virales no son tratables, nuestra única arma es la vacunación. Un amigo que pasó su vida como médico académico universitario que se jubiló en 2016 tampoco había escuchado este hecho.

A medida que estalló la “pandemia”, miré y leí constantemente publicaciones en línea. Después de leer sobre el uso chino, indio y coreano de hidroxicloroquina (HCQ), un agente antipalúdico, contra el coronavirus, en una hora encontré más de 20 artículos científicos, escritos en los últimos 40 años, sobre el uso de agentes lisosomotrópicos, específicamente cloroquina. —Para tratar virus. Como Rip Van Winkle, de repente me desperté, después de décadas, a una realidad médica completamente nueva.

Por ejemplo, "numerosas investigaciones han informado sobre la actividad antiviral in vitro de AZ [azitromicina] contra patógenos virales con concentraciones inhibidoras del 50% que oscilan entre ~ 1 y 6 μM, con la excepción de la influenza H1N1", escriben Damle et al.1

Afirman que la evidencia in vitro sugiere que AZ tiene propiedades antivirales en concentraciones que son fisiológicamente alcanzables con dosis utilizadas para tratar infecciones bacterianas en el pulmón.

El secuestro intracelular de AZ puede prevenir la replicación viral. AZ se está utilizando contra COVID-19, con la justificación generalmente declarada es su actividad antibacteriana o antiinflamatoria.

Los antibióticos utilizados en la enfermedad de Lyme, incluidas las tetraciclinas, macrólidos, metronidazol y ciprofloxacina, pueden tener actividad contra varios virus.

¿Cómo podría toda nuestra educación médica “pasar por alto” esta ciencia básica? Puede ser difícil para los no médicos apreciar la magnitud de esta omisión científica que sacude el mundo y el probable encubrimiento. Es el equivalente farmacéutico de que se le haya dicho durante 40 años que el mundo es plano, solo para que quede expuesto de manera concluyente de la noche a la mañana para que sea redondo. Esta idea de que los virus, como el virus pandémico actual del SARS-CoV-2, pueden ser eliminados por los medicamentos de uso común (antibióticos, antipalúdicos o agentes antiparasitarios), cambia profundamente la práctica de la medicina.

 

Influenza

El artículo científico que me hizo pensar por primera vez en un motivo potencial para ocultar estos datos se refiere a la inhibición in vitro de la replicación del virus de la influenza A humana por la cloroquina (CQ) .3

Fue publicado en 2006. Este artículo y otros, incluido uno publicado en 2005 sobre la eficacia de la CQ contra el SARS-CoV-1, la causa del síndrome respiratorio agudo severo, 4 muestran que la CQ, del cual se deriva la HCQ, es extremadamente eficaz contra algunos virus.

Dada la supuesta preocupación de los funcionarios de salud por las muertes por influenza, ¿por qué no se prosiguió con la investigación sobre CQ? Considere que toda la industria de vacunas de $ 69 mil millones por año se basa en prevenir "enfermedades virales que de otra manera serían" intratables ", como la influenza viral A, el sarampión, etc. Si hay un tratamiento económico y efectivo disponible para estas enfermedades, toda la vacuna la industria se derrumba como un castillo de naipes.

Hasta la pandemia de coronavirus, el sitio web de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) ha sido un anuncio ininterrumpido de vacunas, especialmente la vacuna contra la influenza.

Constantemente se nos dice en las noticias y comerciales que "¡Vacúnese contra la gripe!" debido al riesgo de muerte por el virus de la influenza estacional.

Según los CDC, 80.000 personas murieron en los EE. UU. El año pasado a causa de la gripe. Eso en sí mismo es una mentira. En verdad, la influenza viral real representa solo una fracción de esas muertes. Los CDC y la Organización Mundial de la Salud (OMS) informaron una vez números reales de casos de influenza, y la mayoría de las personas asume que todavía lo hacen. Pero en realidad informan de enfermedades similares a la influenza o enfermedades similares a la influenza, y en el pasado agregaron la advertencia de que solo entre el 4 y el 7 por ciento de las ILI eran influenza, el resto eran otros virus respiratorios. Entonces, cuando dicen que murieron 80,000 personas, solo alrededor de 6,000 realmente tenían influenza viral.5-10 Anteriormente, en las tablas de muertes por ILI, un pequeño cuadro en la parte inferior le indicaba el porcentaje de ILI que es influenza. Los CDC ya no hacen eso, y actualmente, al mirar varios informes anuales, no puedo determinar el porcentaje de ILI que es verdadera influenza desde el sitio web de los CDC. Esta distorsión al informar sobre cifras alarmantes comenzó cuando la vacuna contra la gripe se volvió rentable mediante el uso de adyuvantes y "mandatos suaves", es decir. presionar a los hospitales, las fuerzas policiales y otras profesiones para que vacunen a su personal para "proteger al público".

Por supuesto, la vacuna contra la influenza solo funciona contra la influenza, no contra otros

causas de ILI.

 

Tratamiento versus vacunación en otras enfermedades virales

Vacunar a toda la nación contra la influenza para prevenir 6,000 muertes es difícil de justificar, pero la mentira más grande es aún peor.

Según la ciencia actualmente disponible, es probable que el tratamiento con HCQ en pacientes con influenza grave e ILI podría haber evitado la muerte de millones de estadounidenses. Y las personas dentro del círculo íntimo de la investigación farmacéutica deben haberlo sabido. Las empresas farmacéuticas emplean a miles de virólogos y expertos en enfermedades infecciosas. ¿Debemos creer que fallaron en leer y seguir la investigación viral relevante? Y esto no se trata solo de la influenza y el SARS-CoV-2, sino también de la hepatitis, la meningitis viral, la encefalitis equina, el herpes zóster, el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH), posiblemente la leucemia y otras enfermedades virales mortales conocidas. ¿Fueron las muertes por tales enfermedades virales, durante décadas, un precio aceptable de $ 69 mil millones en ganancias anuales de vacunas?

La vacunación comenzó con la viruela y luego con la poliomielitis. Luego, los programas de vacunación se expandieron a las enfermedades virales infantiles, incluidas las generalmente benignas, como las paperas. La influenza se convirtió entonces en el gran objetivo de la vacuna.

En el camino, se distorsionó la enseñanza de la inmunología de las enfermedades transmisibles a estudiantes de medicina y enfermería. La mayoría de los médicos de hoy no aprenden que la mortalidad por enfermedades infantiles en niños del Primer Mundo bien alimentados y no vacunados era insignificante antes de la llegada de las vacunas.11 Tampoco comprenden la gran diferencia entre la inmunidad por vacunas y la inmunidad adquirida por enfermedades. Después de recuperarse del sarampión o la gripe o las paperas o cualquier otra enfermedad viral común, una persona se marcha con inmunidad celular y humoral de espectro completo.

El sistema inmunológico se fortalece específica y generalmente contra una multitud de enfermedades futuras de formas que no entendemos completamente. Los investigadores de vacunas se concentran en producir una respuesta de anticuerpos, que es una forma muy incompleta de inmunidad.12 incluso dosis repetidas de tales vacunas no producen la verdadera inmunidad tisular mediada por macrófagos que es de por vida y generalmente protege completamente contra la exposición repetida a la enfermedad.

Peor aún, en algunos casos, la inmunidad basada en vacunas puede empeorar los resultados de la enfermedad. Con el SARS y otras enfermedades causadas por virus de ARN, la vacunación ha aumentado el riesgo de morir por una exposición posterior al virus. Este es el resultado de una "mejora inmunológica", en la que los anticuerpos producidos por la vacuna en realidad ocultan las partículas del virus de las células asesinas del sistema inmunológico del huésped.13-15 Se produce una rápida replicación viral que causa una enfermedad abrumadora mortal. La inmunidad celular de la infección natural, por otro lado, es el tipo de inmunidad que puede salvarlo de enfermedades graves como esta.

nuevo coronavirus o la influenza de 1918.

La vacunación no es una panacea. Alguna vez fue el último recurso para el tratamiento de enfermedades. En la era de los enormes beneficios de las vacunas, se ha convertido en la primera opción para todas las enfermedades.

 

COVID-19 y la guerra contra la hidroxicloroquina

Esto comienza a explicar el alboroto sobre HCQ. Nunca había visto una pelea política semejante por una farmacéutica legal.

Cuando la pandemia actual comenzaba a matar estadounidenses en cantidades significativas, el presidente Trump identificó a la HCQ y la azitromicina como de excelente potencial de curación. En todo el mundo, los médicos hablaban y escribían sobre la gran tasa de curación de COVID cuando estos medicamentos se administraron temprano.16-24 Los pacientes enfermos de todo el mundo relataron haber experimentado un cambio casi inmediato de los síntomas una vez que comenzaron con el régimen. La representante estatal Karen Whitsett, demócrata de Michigan, le da crédito al presidente Trump por salvarle la vida al abogar por el uso de HCQ.25

Que yo sepa, ni los gobernadores ni las juntas de farmacia han prohibido jamás ninguna droga legal, ni siquiera los opioides como Oxycontin que causan unas 30.000 muertes al año. Pero cuando se trata de HCQ y CQ, los gobernadores, las juntas médicas y las juntas de farmacia en la mayoría de los estados han prohibido o limitado el uso de HCQ o han amenazado a los médicos con el escrutinio de las juntas de licencias.26 Líderes médicos de los CDC y los Institutos Nacionales de Salud ( NIH) dijo que la HCQ podría no funcionar y proclamó que necesitábamos más estudios, ignorando los múltiples artículos científicos y de posición que se publican diariamente y que demuestran el beneficio de la HCQ.27

El Dr. Anthony Fauci, inmunólogo y director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID) de los NIH, ha desaconsejado el uso de HCQ para COVID-19, pero elogió el tratamiento del síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS) con HCQ en 2013.28- 31 En 2006, la propia investigación de los CDC mostró que la CQ funciona contra el coronavirus en el SARS-CoV-1, sin embargo, sus pautas actuales recomiendan contra el “uso de dosis altas” y no discuten los regímenes de dosis bajas que se usan en todo el mundo. 33 Tenga en cuenta también que el 28 de abril de 2020, el Dr. Fauci promocionó los hallazgos positivos para remdesivir, aunque no se han completado estudios controlados aleatorios. ¿Por qué está promocionando tan fuertemente el remdesiver de $ 3,600 e ignorando casi por completo el régimen de HCQ de $ 20, aparte de decir que este último es de “beneficio no comprobado”?

Los medios actuaron al mismo ritmo que los políticos corruptos. Dijeron que HCQ era experimental. No es así, ha existido durante décadas y ha sido aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA). Luego, afirmaron que era ilegal que los médicos usaran HCQ fuera de la etiqueta. Nuevamente incorrecto. Casi todos los médicos, todos los días, usan un medicamento "fuera de etiqueta" porque, una vez aprobados por la FDA, los medicamentos no se vuelven a estudiar para agregar todos los beneficios potenciales. Y ahora se están publicando y citando literatura científica "piezas de éxito" contra los medicamentos antipalúdicos. Un titular reciente de Los Angeles Times, "Los medicamentos contra la malaria no ayudan en los estudios sobre el coronavirus", sensacionalizó un estudio engañoso.34 Este estudio, realizado en Brasil, prescribió dosis tóxicas, incluso letales, a pacientes muy enfermos al final de la enfermedad cuando era casi seguro La metodología fue severamente criticada por científicos brasileños36, y las autoridades brasileñas están investigando supuestas violaciones éticas37.

Dado que CQ y HCQ funcionan deteniendo la replicación viral, pueden prevenir el daño viral al corazón, los pulmones y otros órganos. Sin embargo, no pueden mejorar el daño orgánico que se ha producido. Si bien el artículo brasileño informó correctamente que CQ no cambió los resultados, este fue un estudio clásico diseñado para fallar.

Desde la década de 1950, el HCQ se ha utilizado para una variedad de problemas, incluido un ensayo de 1960 para la angina de pecho basado en la observación de que el HCQ redujo el lodo debido a los glóbulos rojos aglutinados en pacientes con enfermedades vasculares.38 Si bien los resultados posteriores en pacientes con angina fueron supuestamente negativos , HCQ parece reducir la incidencia de enfermedades cardiovasculares en pacientes reumáticos. Además de sus propiedades antiinflamatorias, HCQ reduce los niveles de colesterol y el riesgo de diabetes tipo 2, y también tiene efectos antiplaquetarios. En 2017, el estudio OXI se diseñó para determinar si el tratamiento con HCQ, en comparación con placebo, reduciría los eventos recurrentes entre los pacientes con infarto de miocardio39.

Millones de personas han sido tratadas con HCQ para la malaria, y comúnmente se administra en el tratamiento de altas dosis a largo plazo de pacientes con trastornos reumatológicos. Hasta ahora, el medicamento se ha distribuido con solo una pequeña mención del potencial de arritmia cardíaca. Mientras que otros efectos secundarios se clasifican como "muy comunes", "comunes" o "raros", los problemas cardíacos son lo suficientemente infrecuentes como para ser notados en "frecuencia desconocida". El folleto de Sanofi sobre la seguridad del paciente para Plaquenil dice: “Pueden ocurrir problemas o insuficiencia cardíaca, cardiomiopatía, agrandamiento o debilidad del corazón si toma Plaquenil durante períodos prolongados…” Las personas con SARS-CoV-2 generalmente requieren solo de 5 a 14 días de tratamiento. Entonces, ¿por qué la FDA sólo ahora emitió una advertencia muy pública contra el uso de HCQ, citando problemas del ritmo cardíaco?

 

¿Existe un encubrimiento político?

En la investigación de cualquier encubrimiento político, la pregunta "¿Quién sabía qué, cuándo?" debe ser preguntada. Los artículos de referencia que discuten la CQ / HCQ y los virus, de todo el mundo, se remontan al menos a 1982.43 Y había mucho interés desde la década de 1970 sobre los agentes lisomotrópicos, es decir, sustancias químicas que se absorben selectivamente en los lisosomas, el orgánulo celular en que HCQ inhibe la replicación viral. 44-46

Al especular sobre los posibles motivos para esconder un arma tan poderosa contra la enfermedad viral durante esta pandemia, algunos podrían sugerir un "estado profundo" de derribo de Estados Unidos. O uno podría centrarse en los conflictos de intereses, lo que sugiere que el portavoz principal, el Dr. Fauci, es una parte integral de una coalición de vacunas.

Específicamente, el Plan de acción mundial sobre vacunas (GVAP) es una colaboración de la Fundación Bill y Melinda Gates y el NIAID del Dr. Fauci. El Dr. Fauci también fue nombrado miembro del Consejo de Liderazgo del Consejo de la “Década de las Vacunas” .47 Aunque es difícil precisar todos los detalles financieros, sabemos que grandes sumas de dinero fluyen de la Fundación Gates hacia los proyectos del NIAID y sus alrededores. , como la asociación de 2019 para "terapias basadas en genes contra el SIDA y la anemia de células falciformes, a la que Gates contribuyó con $ 100 millones.48 Además, la Fundación Gates ha contribuido con $ 2.240 millones al" Fondo mundial ", del cual la Dra. Deborah Birx, con frecuencia en el panel de la Casa Blanca que discute la política COVID-19, es miembro de la junta.49

El reciente proyecto de ley HR 6074 en el 116º Congreso para desarrollar medicamentos y vacunas para el coronavirus es una ganancia inesperada de $ 3.1 mil millones para las compañías farmacéuticas, y también incluye $ 8.36 millones para el NIAID del Dr. Fauci para "capacitación". empresas que están trabajando en una vacuna contra el coronavirus, están asociadas con NIAID51 y reciben un tratamiento especial. A Moderna se le permitió eludir las pruebas estándar de drogas en animales a largo plazo y lanzar pruebas de la vacuna mRNA-1273 en humanos el 24 de febrero en los NIH, pocos meses después de la decodificación genética del virus. El asesor médico en jefe de Moderna, Tal Zaks, afirma: "No creo que probar esto en un modelo animal esté en el camino crítico para llevarlo a un ensayo clínico". , Tal Zaks ejerció opciones sobre acciones, vendiendo 125,044 unidades de acciones de MRNA por $ 1,526,787.53

Sin embargo, nada de esto explica los 40 años de desinformación médica y supresión de la verdad farmacéutica. Haber encubierto el conocimiento durante cuatro décadas de que los virus podrían potencialmente ser tratados con antimicrobianos requirió un gran esfuerzo:

• Censura. Es probable que algunos científicos nunca volvieran a publicarse después de haber escrito un artículo sobre los beneficios antivirales de la CQ.

• Comprar el silencio de los medios informativos. Esto es evidente por el apagón en todo el espectro de noticias políticas sobre los efectos adversos de las vacunas. Los fabricantes de productos farmacéuticos proporcionan la publicidad más lucrativa para los programas de noticias escritos y difundidos.

• Desorientación. Durante años, los profesores de farmacología de las facultades de medicina han perpetuado las mentiras por omisión.

• Mentiras de las empresas farmacéuticas. Merck fue sorprendida publicando su propia revista “revisada por pares” para promover sus medicamentos.54

• Captura regulatoria. Las "grandes farmacéuticas" esencialmente son propietarias de la FDA por ser su principal financiador y empleando a más del 58 por ciento de los reguladores y administradores de alto nivel de la FDA antes o después de su mandato.55,56

• Fondos de investigación. Big Pharma es el principal financiador de casi toda la investigación de medicamentos "independiente", y no hay ningún incentivo para buscar soluciones baratas o menos rentables.

Trascendencia

La pandemia de COVID-19 está llamando la atención sobre el potencial para el tratamiento de enfermedades virales con los medicamentos disponibles actualmente y exponiendo investigaciones de larga data pero ignoradas. Las implicaciones de todo esto son muy inquietantes. ¿Dónde han estado los virólogos y los “expertos” de los CDC que afirman preocuparse por las muertes por influenza? ¿Se ha construido la floreciente industria de vacunas de casi un billón de dólares a expensas de la vida de los pacientes? Haciendo caso omiso de la considerable base de datos de lesiones causadas por vacunas y la controversia sobre el peligro a largo plazo de las vacunas para el sistema inmunológico, si el HCQ u otros medicamentos hubieran podido tratar enfermedades virales de forma económica y eficaz, nunca hubo necesidad

para las vacunas para empezar. Como supuestamente admitió la OMS, como se registra en un video de YouTube actualmente no disponible de la Cumbre de Seguridad de las Vacunas de 2019, la "línea del frente se está volviendo inestable", lo que significa que los médicos están cada vez menos convencidos de que las vacunas son seguras y deseables.

Boris Yeltsin, mientras estaba rodeado por tropas soviéticas en los escalones de Dom pravitelstva Rossii Federatsii (la Casa Blanca rusa) de Moscú, opinó: "Puedes sentarte en un trono de bayonetas, pero no puedes permanecer sentado en él por mucho tiempo". Se necesitaron 70 años para que la verdad sobre el régimen soviético asesino y corrupto rompiera la propaganda, pero cuando las masas populares entendieron, derribaron el muro de Berlín. Es de esperar que el muro de silencio y coerción que ha apuntalado a una industria de vacunas corrupta, y sí asesina, ahora sea desmantelada por médicos y pacientes cotidianos que se han dado cuenta de la "mentira más grande" y están comenzando a decir: "Sí, Virginia, los antibióticos y otros antimicrobianos tratan los virus.

** Lee D. Merritt, M.D., practica cirugía ortopédica y medicina anti-envejecimiento en Omaha, Nebraska, y fue presidente de AAPS. Contacto: loganpod@gmail.com.

REFERENCIAS:

 

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Este artículo fue publicado en:  Journal of American Physicians and Surgeons Volume 25 Number 3 Fall 2020


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2 comentarios:

  1. La corrupción en la industria farmacéutica.
    Uno de tantos resultados a la adoración del dios dinero.

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